
La Zona Eléctrica 0156 Troubled Mind – La Zona Eléctrica
Volvemos a charlar con nuestros amigos de Troubled Mind y en esta ocasión no es como hace un año. Para ellos tampoco es un estreno fácil, han lanzado la primera de las tres últimas canciones grabadas por Nacho Loras y se juntan sentimientos con los que es fácil lidiar por separado pero no al unísono. Presentar en sociedad una canción, cuando se trata de un grupo que se toma su tiempo en dar el visto bueno al resultado de un proceso, siempre es motivo de festejo pero la despedida de un amigo, por anunciada que sea, no se asimila igual un día que otro.
Carlos y Javi han vuelto a pasarse por nuestros micrófonos para que tu, oyente de La Zona Eléctrica seas el primero en disfrutar de Desert Man, una canción fiel al sonido Troubled Mind. Un sonido que es testigo de la mutación que ha sufrido la banda desde sus inicios, pero sin que esto suponga un giro de 180º. La cuidada producción de Carlos Saiz y su vuelta a la voz del proyecto, son seña de identidad de Troubled Mind en este EP. Disco que fue concebido como el que prepara un gran viaje y no pierde de vista los detalles del mismo, por pequeños que puedan parecer a ojos de alguien ajeno, pero que son piezas angulares para quien busca el lugar adecuado de la pieza del puzle sonoro que supone esa travesía.
No importa el motivo que haya elegido Troubled Mind para lanzar ahora esta canción, por homenaje, por deuda, como recuerdo, una mezcla de ellos o cualquier otro. La realidad es que este Desert Man puede convertirse en una canción de culto antes de que de a conocer, porque aglutina todo lo que nos gusta de la música y todo lo que representa el Rock. Trabajo bien hecho sin la certidumbre de un reconocimiento. Meticulosidad en la composición, sentimiento en una letra sin artificios. Humildad individual para un destello del conjunto de los componentes de la banda, en definitiva si en La Zona Eléctrica hablamos de lo mejor de la música es por canciones como esta.
Si alguien, en algún momento muy futuro tiene que recordarme, que lo haga por la música que escucho. Y que en ese repertorio de canciones no falte ninguna de nuestros amigos de Troubled Mind. Que el Rock nos acompañe.